Viaje Perú y Amazonas: Dos Tesoros - 10 noches

Bienvenido a Lima, conocida como la Ciudad de los Reyes, fundada por Francisco Pizarro en 1535. Capital del Perú y una de las metrópolis más vibrantes de Sudamérica, Lima conserva un tesoro arquitectónico único en su centro histórico: iglesias barrocas, conventos coloniales, balcones virreinales y antiguas casonas, reconocidas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Pero Lima no es solo historia: también es la Capital Gastronómica de América, famosa por su cocina de clase mundial, donde la fusión de sabores andinos, europeos, africanos y asiáticos ha dado lugar a una de las cocinas más aclamadas del planeta.
A su llegada al Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, un anfitrión lo recibirá y lo acompañará a su hotel, mientras disfruta de sus primeras vistas de esta ciudad costera que combina modernidad, tradición y un espíritu limeño inigualable.

Después del desayuno, su guía lo recogerá de su hotel para comenzar un recorrido por la Lima Colonial. Visitaremos la Plaza Mayor o Plaza de Armas, donde se fundó la ciudad en 1535. Este espacio histórico está rodeado de monumentos como la Catedral de Lima, el Palacio Arzobispal, el Palacio de Gobierno y el Palacio Municipal, todos ejemplos de majestuosidad virreinal.
Continuaremos hacia el Convento de San Francisco, construido en el siglo XVII y famoso por su impresionante biblioteca de incunables, claustros decorados con azulejos sevillanos del siglo XVI y sus enigmáticas catacumbas, que fueron el cementerio de más de 25,000 personas durante la época colonial.
La ruta continúa por la Lima Moderna, pasando por los distritos de San Isidro, el centro financiero de la ciudad, y Miraflores, conocido por su paseo marítimo con espectaculares vistas del Océano Pacífico y la Costa Verde. Aquí tendrá la oportunidad de apreciar los acantilados que hacen de Lima una de las pocas capitales del mundo con acceso directo al mar.
Por la tarde, visitaremos el famoso Museo Larco, fundado en 1926 por Rafael Larco Hoyle. Ubicado en una mansión virreinal del siglo XVIII construida sobre una pirámide precolombina del siglo VII, el museo alberga una colección única que abarca más de 3000 años de historia precolombina. Sus galerías exhiben piezas de oro y plata, cerámica moche y textiles prehispánicos. Entre sus colecciones más famosas se encuentra la galería de arte erótico precolombino, considerada una de las más visitadas de todo el Perú.

Un breve y espectacular vuelo sobre los Andes nevados nos lleva a Cusco, la antigua capital del Imperio Inca y joya colonial del Virreinato del Perú. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, esta ciudad conserva vestigios vivos de su pasado inca y colonial en sus calles y casas. A su llegada, un anfitrión lo recibirá y lo acompañará a su hotel.
Mercado de Pisac.
El recorrido comienza hacia el Valle Sagrado de los Incas, entre tierras fértiles y majestuosas montañas. Llegaremos al pintoresco pueblo colonial de Pisac, famoso por su colorido mercado artesanal. Aquí, artesanos de las comunidades cercanas ofrecen textiles de alpaca, joyería y cerámica tradicional. Este mercado, que mantiene su esencia ancestral, es una excelente oportunidad para admirar y adquirir productos únicos de la cultura andina.
Almuerzo en Wayra con espectáculo de Caballos Peruanos de Paso
Almuerzo en Wayra con espectáculo de Caballos Peruanos de Paso. Continuamos hacia el restaurante Wayra, ubicado dentro del prestigioso Hotel Sol y Luna, donde no solo disfrutará de un almuerzo gourmet, sino también de un inolvidable espectáculo ecuestre. El Caballo Peruano de Paso, declarado Patrimonio Cultural del Perú, es conocido por su paso elegante y armonioso. Su paso lateral, suave y distintivo, ha sido reconocido mundialmente como uno de los más cómodos entre las razas de caballos. Esta tradición ecuestre, acompañada de música y danza, conecta a los visitantes con una de las expresiones culturales más emblemáticas del país.
Complejo Arqueológico de Ollantaytambo.
Por la tarde, visitaremos Ollantaytambo, un impresionante complejo arqueológico inca que combina funciones religiosas, agrícolas y militares. Sus gigantescas terrazas, templos y murallas formaron tanto una fortaleza estratégica como un centro ceremonial. El pueblo moderno, conocido como el "Pueblo Inca Viviente", conserva el trazado urbano original, con calles empedradas, canales de agua y costumbres heredadas directamente de los incas. Esta es una experiencia única: caminar por Ollantaytambo es como retroceder en el tiempo.
Pernocte en el Valle Sagrado.

Hoy vivirá una de las experiencias más esperadas de su viaje. Temprano, lo trasladaremos a la estación para abordar el tren Vistadome, que atraviesa espectaculares paisajes a lo largo del río Urubamba hasta llegar al pueblo de Aguas Calientes. Desde allí, un autobús nos llevará a la majestuosa ciudadela de Machu Picchu, una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno y el símbolo por excelencia del Perú.
Durante siglos, la ciudad permaneció oculta entre montañas cubiertas de vegetación hasta que fue redescubierta en 1911 por el explorador Hiram Bingham. Machu Picchu fue un centro ceremonial, astronómico y agrícola, así como el refugio privado del emperador Pachacútec. La ciudadela se divide en dos sectores:
el sector agrícola, compuesto por terrazas que descienden por la ladera de la montaña; y
el sector urbano, con templos, plazas y mausoleos reales tallados con admirable perfección arquitectónica.
Recorrer este santuario histórico es una experiencia espiritual y cultural, donde cada rincón revela la grandeza de la civilización inca.
Después de la visita, regresará y pasará la noche en la zona de Machu Picchu.

Este día está reservado para experimentar Machu Picchu a su propio ritmo. Puede optar por regresar al santuario y explorar tranquilamente sus rincones, observar detalles arquitectónicos que pasaron desapercibidos el día anterior o simplemente disfrutar de la atmósfera mística que rodea la ciudadela.
Para quienes buscan una experiencia más desafiante, existe la opción de ascender al Huayna Picchu, la montaña con forma de pirámide que se alza tras las ruinas. El camino empedrado es exigente, pero la recompensa es única: una vista panorámica inigualable de Machu Picchu y los valles circundantes. Otra alternativa es caminar hasta el Puente Inca, una antigua entrada secreta utilizada con fines estratégicos, o hasta el Intipunku o "Puerta del Sol", que era el principal acceso a la ciudadela en la época inca. Desde allí, las vistas del amanecer sobre las ruinas son de ensueño.
Por la tarde, regreso en tren y traslado a Cusco, donde un guía lo recibirá y lo llevará a su hotel.